A las tres de la tarde suena el timbre y doy un respingo. Llevo rato pensando que no tardaría en llegar. No sé porqué siempre me pongo nerviosa cuando tengo que tratar con alguien desconocido. Y este tipo además es con quién voy a pasar toda la tarde en 40 m2.Respiro profundamente y bajo lasSigue leyendo «Capítulo 6 «Una casa se empieza por el tejado»»